La apuesta por la I+D+i continúa constituyendo un factor fundamental en la competitividad de las empresas y el crecimiento económico, al que los servicios de los evaluadores acreditados siguen dando respuesta, participando como agentes colaboradores y facilitadores de las políticas fiscales para su fomento.
En este aspecto, la acreditación de ENAC es una pieza fundamental en el funcionamiento de mecanismos específicos diseñados por el gobierno para lograr un uso más eficaz por parte de las empresas de ciertas desgravaciones fiscales a las inversiones en Investigación y Desarrollo.
Pero, más allá de este caso particular, la acreditación posee un potencial dinamizador de la innovación y el conocimiento pocas veces ponderado y que está en la base misma de su actividad, y es el hecho de que en los procesos de acreditación se recurra a expertos técnicos del más alto nivel pertenecientes a instituciones, centros de investigación y universidades.
De esta manera, se logra una interacción entre los grandes centros de investigación y las pequeñas empresas (principalmente laboratorios), lo que facilita la transferencia de conocimientos y know-how de esos centros públicos de investigación hacia laboratorios y otros evaluadores de la conformidad que dan servicio directo a la industria y a la administración lo que revierte en un beneficio para la sociedad en su conjunto.
Ejemplos de servicios acreditados
La certificación de proyectos es un instrumento que la Administración Pública pone a disposición de las empresas, con el que incentivan con beneficios fiscales los gastos e inversiones realizados en actividades de I+D y de innovación tecnológica (según lo dispuesto en el artículo 35 de la Ley del Impuesto sobre Sociedades). Para ello, las empresas pueden solicitar al Ministerio de Economía y Competitividad un informe motivado en el que se refleje el contenido sobre I+D+i de un determinado proyecto. Este informe es vinculante para la Administración Tributaria, y confiere, por tanto, a la empresa una seguridad jurídica a la hora de aplicar las desgravaciones correspondientes a sus gastos en I+D+i.
Para solicitar el informe motivado, la empresa debe contar con un informe técnico y económico de evaluación del proyecto certificado por una entidad acreditada por ENAC para certificar los proyectos de las diferentes disciplinas tecnológicas.
En el caso de la actividad de I+D+i del personal investigador, las entidades acreditadas certifican que dicho personal participa en exclusiva y por la totalidad de su tiempo de trabajo en actividades de I+D+i, pudiendo permitir la obtención del informe motivado para la bonificación en las cotizaciones a la Seguridad Social o deducciones fiscales existentes en el impuesto de sociedades para este tipo de actividades.